Con esta receta fácil y rápida conquistarás a tus invitados
Tus amigos han decidido que esta noche la fiesta comienza en tu casa y no tienes ni idea de qué vas a preparar. Tranquilo, ¡que no cunda el pánico! Seguro que tienes todos estos ingredientes en la cocina. Lo más importante de todo, por supuesto, es la patata. Los demás condimentos ya son cosa tuya…
Ingredientes:
- Una patata grande
- Orégano, sal y pimienta
- Aceite de oliva
- Salsa de tomate
- Queso rallado
- Jamón cocido
- Otros ingredientes que te vuelvan loco: champiñones, aceitunas negras, bacon, salmón, atún, chorizo…En la variedad está el gusto.
Instrucciones en varios pasos sencillos. ¡Atiende!
Lavamos bien la patata, porque nos la comeremos con piel y todo. Después la cortaremos en rodajas de un grosor aproximado de 2 milímetros.
Mientras precalentamos el horno, vamos colocando todas las rodajas en una bandeja. Salpimentamos al gusto y añadimos también un chorrito de aceite.
Ya están listas para ser horneadas, a 180ºC, durante unos 20 minutos, o hasta que veas que las patatas están asadas y crujientes.
Las sacamos (pero no apagues el horno, que lo vamos a volver a usar).
¡Tachán! Las patatas se han convertido en pequeñas bases de pizzas y ahora toca decorarlas. Las cubrimos con salsa de tomate, queso rallado, nuestros ingredientes preferidos y un poco de orégano. Lo bueno de esto es que puedes hacer tantas combinaciones de patata-pizzas como quieras.
Volvemos a meter las patatas durante 5 minutos más a 180ºC hasta que el queso se funda y se dore ligeramente. ¡Y ya están listas las patata-pizzas! Súper fácil, ¿verdad? Y seguro que te ha sobrado tiempo para ducharte, peinarte, vestirte y poner la mesa para tus amigos, que justo acaban de llegar. Venga, todo el mundo a la mesa. ¡A comer!
Esperamos que te haya gustado la receta. No dudes en dejarnos tus comentarios y compartir tu deliciosa experiencia con nosotros.
